Viernes 23 de febrero de 2018

Esto podría cambiar tu rutina para siempre.
Ojo, no estamos diciendo que el maquillaje es malo, de hecho nos encanta, ¿Pero alguna vez has pensado en sumarte al movimiento que empezó Alicia Keys hace un tiempo de dejar de usar productos por un tiempo?
¿Qué podría pasar? Tenemos varias respuestas a la interrogante:
1. Al principio, te puedes sentir insegura.
Sabemos lo que estás pensando... ¿Me veré más cansada? ¿Se me notarán las ojeras? ¿Seré menos atractiva? Las probabilidades indican que no, nadie se dará cuenta. Aunque te sientas un poco insegura al principio, esos miedos se desvanecerán una vez que te acostumbres y descubras que tienes media hora más en la mañana para ti.
2. Sentirás menos estrés.
Mantener una rutina de belleza todos los días puede agobiarte. No parecer un mapache con el tapaojeras, que si el rimmel te dejó grumos o si el delineador se corrió cuando llegabas a una reunión. Al no usar maquillaje te liberas de esas pequeñas ansiedades y te sientes más relajada para hacer otras actividades.
3. Tu piel puede cambiar
Entre la base, corrector y rubor, usamos demasiadas capas de maquillaje en nuestra cara. Y peor aún, llegada la noche ni siquiera dedicamos el suficiente tiempo para removerlo completamente, quedando acumulado en los poros. Cuando le das un break a tu piel y la dejas al natural, es probable que notes un cambio y que la tez se aclare en un par de días.
4. Te verás más joven
Especialmente si eres de la que se aplique toneladas de maquillaje a diario. Esos rasgos como las pecas de la nariz y las mejillas rosadas que siempre cubres, son los que te hacen naturalmente más joven.
5. Inviertes más en el cuidado de la piel
Si ahora vas a estar con la cara al natural, también vas a querer que tu piel se vea resplandeciente y fresca. Así que ve por los sueros y las mascarillas hidratantes, además del protector solar que es lo más importante. Tu cutis te lo agradecerá.
6. Puede que descubras que eres más feliz sin maquillaje (o que necesitas menos para verte bien)
Una vez que hayas decidido abandonar el maquillaje por un tiempo, volver a la misma cantidad de productos otra vez puede sentirse un poco extraño, y pesado. En vez de cubrir tu cara entera con base, es probable que ahora solo necesites un poco de corrector aquí y allá. No importa lo que decidas hacer, habrás ganado una nueva perspectiva, mucho más fresca.