
Miércoles 27 de febrero de 2019
Miércoles 27 de febrero de 2019
Sus humanos no podían creer lo que veían.
Los perros son criaturas increíblemente juguetonas, por eso son tan buenos compañeros. Les encanta correr, saltar y jugar con juguetes, humanos, y otros animales.
Aunque claro, a veces pueden llegar a ser demasiado sociables, como este can que le dio un buen susto a sus humanos cuando llegó con un amigo bastante inesperado.
El perro, que viajaba en el auto con sus dueños, necesitaba un descanso. Se detuvieron para dejarlo estirar las piernas en un camino vacío junto a un bosque. Inmediatamente el can corrió hacia el bosque para dar un paseo expres.
Mientras tanto, sus humanos miraban los árboles esperando a que su amigo regresara de hacer ejercicio. Sin embargo, cuando llegó, no podían creer lo que veían. Un oso negro venía junto a su mascota.
Ambos venían corriendo juguetonamente y una vez que llegaron a la carretera, el oso dejó de correr y se giró para perseguir nuevamente al perrito.
Los dueños estaban asombrados, pero luego llegó el miedo por si el animal se ponía salvaje y les pudiera hacer algo a ellos o al perrito. Afortunadamente el oso cambió de dirección en el último momento y se devolvió al bosque. Sin duda, toda una aventura.